CASO: Un mexicano pagó a un tramitador o gestor para que le legalizaran su vehículo. Le entregaron placas mexicanas de un estado del interior de la república y su REPUVE. Así comenzó a circular. Pero resulta que el señor fue al otro lado y de regreso lo pararon en la aduana de Sonoyta y al verificar el número de serie del vehículo, la aduana no lo tenía como legalmente importado y se lo embargaron iniciándole un PAMA. Moraleja: Las placas y el REPUVE no equivalen a que el carro esté legalmente importado.
SENTENCIA: El Tribunal (TFJA) ordenó la devolución del vehículo y la cancelación de los impuestos y multas por $151k porque se dieron irregularidades respecto al acta que el inspector de la aduana levantó.